martes, 27 de febrero de 2018

Permisos


Déjame, por dentro y por fuera, acariciarte;
tapar de amor tus agujeros,
quemar tu piel de pollo en arrebatado fuego
y derrama mi luz sobre tu cuerpo.

Dejarte flipando en tu sonrisa
llevarte en un tardío transporte a tu destino
y decirte gracias en un beso.

Permitime penetre hasta tu alma
y te sientas sola y desvalida
feliz de estar allí dormida
en un sueño que no quieres que se acabe.

Autorizame a que perdamos referencias
del tiempo y el espacio que nos  contiene
y juguemos juntos la no existencia
de dos siluetas desnudas en tu
mi cama deshecha.

Reuncia a tu derecho  de negarme
cualquier deseo de satisfacerte;
luego, consiente que me olvide
y me quite de encima
el lastre de las ganas que te tengo.

Finalmente
admite que lo quieres
que me quieres
en una libertad que nos atrapa
y entrégate al abandono de pensarme
sin contar los días que nos faltan.







jueves, 22 de febrero de 2018

Abortar es matar


El tema de la despenalización de aborto amerita un texto más trabajado… y no pienso hacerlo. Voy a por lo que tripas sale.
Primero hagamos un distingo significativo. Muchas personas que estamos a favor de la despelalización del aborto no pensamos en el aborto como alternativa. Pero claro, para entender esto hay que tener un mínimo de empatía con gente que vive realidades muy distintas a las nuestras.
Estoy en contra de abortar pero amo la vida y quiero proteger a quienes no han tenido mi suerte.
Hoy por hoy muchas chicas abortan, pero depende de cuánto dinero dispongas que eso sea sano o peligroso. Creo que la principal solución es una educación sexual real, integral, en la escolaridad obligatoria y que ninguna religión se meta en esa decisión. Cada esquema tiene su espacio y cada fiel su catedral, pero enseñarles a todos lo básico es responsabilidad del Estado.
Eduquemos para relaciones sanas. Hasta ahí, todos de acuerdo… creo. Si no estás de acuerdo, no sé qué hacés leyendo.
Pero eso no cubre una generación y una clase social que culpa de decisiones políticas influenciadas por una iglesia reaccionaria y una pobreza extrema no pudo cumplir.
El discurso liberal es que si vos tenés la suficiente plata te podés hacer un aborto clandestino seguro y si no, hamacate con lo que te toque; agujas de tejer, rodillas contra el piso o tés de lo que sea….
Es triste ver esta falta de empatía.
Peor quizás es ver que religiones que se niegan al aborto se resistan a la distribución de profilaxis gratuitas.
Amo la vida y por eso estoy a favor de la despenalización del aborto. Porque creo que la vida de TODOS vale lo mismo. No hago una diferencia de clases.
Porfa, pensalo antes de opinar boludeces o de pegar banner pelotudos. Pensá en cuánto vale la vida.
No tengo ganas de argumentar hoy sobre algo que me parece muy obvio, pero me siento en la necesidad de hablar. El próximo que publique una pelotudez respecto al aborto entre mis amigos, sin pensarlo… bueno, será eliminado porque si no podés pensar en el otro, tampoco sos capaz de pensar en mi como amigo si no es desde tu propio pupo y de eso paso.
Saludos a todos.



Mal dormir


Acertado acierto nuestro encuentro
entramados en la noche
ambos cuerpos
mientras tu piel acaricia mis dedos
un arroyo sediento cae de tu sexo
y el silencio semiorgásmico de tus besos
no se calla
en toda la noche.
Desventurada la noche
trata vanamente en ladridos perros
distraer al tacto labial del epidérmico choque
pero no puede
y muerta de envidia la luna se esconde
tras mentirosa nube.
Desnudos, dos cuerpos, charlan
se abrazan, se separan,
hablan con palabras y silencios
y matan rutinas y tradiciones
y beben las frustraciones en amarillas y espumosas copas
y malduermen sabiendo el costo
de los nuqueados ojos al siguiente
sol laboral
y duermen tarde
y despiertan temprano
y saben que esa libertad
de estar y no estar, de ser y no ser,
y el pleno desapego
y el desenfreno deseo
y la despedida
y la avidez
de otro encuentro
“libre, libre de todo y libre de mí”