miércoles, 28 de enero de 2015

Leo a Borges (Diálogos plutónicos 08)

Se aproxima, bella y sonriente, con esas sonrisas de quien tiene algo que contar. "Quién pudiera leer tanta belleza", pienso mientras la veo venir.
-Por fin encontré algo de tu querido Borges que me gustó.- declara contenta consigo.
-"Instantes" no es de Borges.- enuncio sin pensar siquiera lo que digo.
-Cómo que no, si yo... ¿vos cómo sabés que era ese poema?
-Algunos prejuicios tienen la validez de un juicio, aunque debo evitarlos.
-Y vos qué sabés si es o no de Borges ¿vos leíste todo lo que escribió?
Pienso en la infinidad de entrevistas, textos póstumos y etcéteras con los que la señora Kodama solventa el pasar de sus días como una Yoko Ono argentina y respondo.
-No, seguramente no. Pero de ese texto, además de no corresponderse con el estilo y la temática del ciego, se habló mucho.
-A sí...- expresa con sorna -seguro que vos sabés más que Internet.
-No, no sé más. Sólo soy menos mentiroso.
-A mí no me importa. A mí me gusta y listo.
-No me molesta que te gusta, está todo bien... Pero no es de Borges.
-Entonces sigue sin gustarme Borges.
-Entonces seguís sin haber leído Borges.
-Entonces, andá a cagar.- y dicho eso se marchó.

Se fue, bella y enojada, con ese rictus de quien no quiere ya hablar conmigo. "Quién pudiera leer tanta belleza", pienso mientras la veo irse.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario